Inner Child / Crystal Herbs / 15 ml.
A cada uno de nosotros se le asigna un ángel guardián para ayudarnos a conectar con nuestra naturaleza espiritual inherente y con nuestra luz divina. Este ser angelical se acerca a nosotros al nacer, y el vínculo se forja entonces para continuar a lo largo de esta vida y, posteriormente, para ayudarnos en muchas otras encarnaciones.
Las personas sensibles pueden percibir la presencia de este ángel, que representa nuestro ser interior angelical, especialmente en momentos de quietud o meditación. Incluso podemos aprender a comunicarnos con esta presencia divina para recibir ayuda, sanación o guía clara en nuestro camino. Esto siempre se concede para nuestro mayor bien divino, ya que el propósito del ángel guardián es brindarnos ayuda y apoyo espiritual siempre que lo necesitemos.
Los reinos angélicos nunca han adoptado un cuerpo físico en la Tierra, sino que han optado por ayudar y apoyar a la humanidad desde las dimensiones espirituales superiores. Nosotros, en nuestra densidad física, con el tiempo nos damos cuenta de la necesidad de conectar con estas vibraciones más sutiles y armoniosas, para poder integrar nuestra naturaleza espiritual en nuestra vida física. Esto requiere dedicación para incorporar más quietud, silencio y meditación a nuestra vida cotidiana, pues solo así podemos aprender a sentir la presencia de nuestro ángel guardián. Solo entonces estas frecuencias más sutiles pueden sintonizar con nuestra consciencia ascendente y formar un vínculo más fuerte.
La Esencia del Ángel Guardián ayuda con esta conexión, para hacerla más fuerte, para que podamos conectarnos más conscientemente con lo divino.
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